RAIGAMBRE

Revista Cultural Hispánica

viernes, 8 de noviembre de 2013

LA EUSKAL ETXEA NO ES LA CASA DE LOS VASCOS

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Por Antonio Moreno Ruiz 


Euskal Etxea" significa, grosso modo, "casa vasca". Pero no una casa vasca “cualquiera”… Ni tan siquiera una casa de defensa de la cultura vasca ni nada que se le parezca. Al igual que socialistas y comunistas crearon las llamadas “Casas del Pueblo”, la “Euskal Etxea” es una iniciativa al servicio de una política muy concreta, creada por el Partido Nacionalista Vasco, un partido descaradamente racista, burgués y clerical, y por supuesto, antiespañol, luego travestido de democracia cristiana, que nada quiere saber ni del Centro Español ni de los emigrantes de otras regiones de España que arribamos a la Ciudad de los Reyes.

Como veo que existe una ignorancia y una manipulación tan brutal o más que en la propia y malhadada España, veo necesarias unas cuantas aclaraciones:


-El Partido Nacionalista Vasco fue fundado por Sabino Policarpo Arana Goiri, un “pensador” que se destacaba por su acendrado racismo, el leitmotiv para querer separar a Vasconia de España, desde un punto de vista pretendidamente vizcaíno. El hecho de que por Hispanoamérica haya “Euskal Etxea”, esto es, satélites del PNV, es un despropósito es más grave aun dado que los miembros de la Euskal Etxea no son vascos y me explico: Según las teorías racistas de Sabino Arana, la inmensa mayoría de ellos, al ser notoriamente mestizos, no llegarían ni tan siquiera a “maketos”, que es como definían con una saña atroz al resto de los españoles. Serían todavía peores según sus xenofóbicos cánones. Esto en cuanto al Sabino separatista (1); porque el último Sabino es el arrepentido (2) que reformula toda su teoría política, pretendiendo crear la Liga de Vascos Españolistas, cosa que omiten con premeditación y alevosía sus supuestos discípulos.


-La ikurriña, bandera inspirada en la Union Jack del imperio británico, fue ideada como emblema para la sección vizcaína del Partido Nacionalista Vasco, nunca como emblema de todos los vascos. Su creador, Luis Arana (hermano de Sabino), protestó hasta sus últimos días por la incomprensión y manipulación de este símbolo por parte de sus correligionarios.

Es importante citar el dato de la inspiración porque, lejos de tener nada que ver con la causa irlandesa, el nacionalismo vasco utilizó su odio a España (esto es, su odio a sí mismos) al servicio del imperialismo anglosajón que tanto daño ha hecho a nuestros hermanos gaélicos. Sabino Arana felicitó por telegrama a la administración norteamericana tras la invasión de Cuba, Puerto Rico y Filipinas. En la II República Española, régimen desastroso que duró de 1931 a 1936, traicionó su teórico catolicismo desde primera hora, pues jamás luchó contra las hordas radicales que desde primera hora comenzaron la quema de conventos y la matanza de religiosos. Solo buscaron una engañosa “autonomía” que no querían (y en verdad siguen sin querer) para los demás pueblos de España, cosa que les dio el gobierno republicano de Madrid en su momento. Asimismo, intentaron negociar un protectorado con Mussolini, el cual no les prestó atención. Bien enterado de todo esto estaba José Antonio Aguirre, el flamante presidente regional vasco que, como sus correligionarios, se rindió, traicionando al Frente Popular que estaba a las órdenes de Stalin y a la República destrozada por ella misma, para a posteriori trabajar para la CIA.

Empero, con estos camaleónicos y desastrosos antecedentes, no es de extrañar que al llegar el producto a la otra punta del mundo, la confusión sea de órdago…

Jamás ondeó en América la ikurriña, y jamás ondeó en la Península hasta casi el siglo XX. Nada que ver ni con historia ni con cultura. Simplemente, una burda manipulación política que no respetó ni el deseo de su fundador.

La que sí ondeó, y acaso sería un emblema lindo para los descendientes de vascongados en América, es la cruz de Borgoña blanca bajo fondo rojo, esto es, la bandera que llevaban los marinos vizcaínos, y que aún está presente en el escudo de Guayaquil. En cuanto a los descendientes de navarros, pueden seguir usando las cadenas que los bravos soldados de aquella perla tradicional de España arrebataron a los almohades en Las Navas de Tolosa, mientras abrían el valle del Guadalquivir para la unidad católica; ese emblema que por supuesto, figura en el escudo de toda España.



-El término “Euskadi”, tan utilizado por estas instituciones a lo largo y ancho del mundo, al igual que la ikurriña, no tiene nada que ver con la historia del pueblo vasco, por lo tanto, nunca se empleó en las Indias, porque resulta que “Euskadi” fue una palabra que se inventó Sabino Arana que no existía en el idioma vascuence. Como bien dice el polígrafo Jon Juaristi, existe el término “Euskalerría”, que es un concepto cultural, referente a quienes hablan euskera (esto es, los euskaldunes o vascohablantes); que no político. Y es que en verdad jamás existió una unidad política vasca. Una cosa eran las provincias vascongadas, esto es, Vizcaya, Guipúzcoa y Álava, integradas en la Corona de Castilla, con una foralidad muy similar a ésta, y otro caso el Reino de Navarra, jurídicamente diferente y que jamás fue un “estado étnico vasco”, sino que amén de albergar parte de “Euskalerría”, fue la primera corte española en utilizar la lengua romance. Así como en las Vascongadas puede encontrarse simbología celta y en la lengua ibera, muchos topónimos que se parecen a los euskaros, aunque es cierto que no han podido sacarse conclusiones satisfactorias.

Asimismo, lo vascón como tal ha estado extendido por otros puntos de la Península Ibérica, no sólo por las Vascongadas y Navarra. Cuando Fernán González fundó Castilla, sus primeros pobladores fueron básicamente cántabros y vascones. Y decimos “vascones” porque en verdad “vasco” es un término relativamente moderno. “Vascongado” sería lo correcto para referirnos a las mentadas provincias. Y “vascongado” significa “vasconizado”, pues la cuna arrancaría de la actual Navarra, que también albergó multitud de aportes celtíberos, romanos e incluso mozárabes. No es contradictorio: Como dice el arqueólogo Martín Almagro Gorbea, Álava es la provincia española que mayor epigrafía romana posee, y también es la de mayor epigrafía euskara. Pero el nacionalismo, siempre excluyente y manipulador, y con ridículas obsesiones “etnicistas” que en verdad no valoran justamente la ancestral, importante y expansiva cultura vasca, gran símbolo de la genuinidad hispánica, ni se aclara ni pone en perspectiva los complejos y contundentes hechos históricos.

Lógicamente, los vascones han tenido relaciones de parentesco con cántabros, así como el vascuence se habló a las puertas de Burgos e influenció en la fonética castellana. El sonido “rr”, el cambio de la “f” inicial latina por la “h”, a posteriori inspirada, o palabras como “izquierda”, “pizarra”, “chabola”, “boina” o “zamarra” proceden de la que es la lengua española más antigua. Pero, al contrario de lo que dice la Euskal Etxea de Lima, el marino Juan de la Cosa era cántabro o montañés, que no vasco. Era nacido en Santoña, territorio que jamás perteneció a las provincias vascongadas. Cierto es que algunas partes del norte de España fueron disputadas entre castellanos y navarros, mas cuando nació y se crió este gran marino, ya habían pasado siglos, y si bien quedaba una hermandad más que sincera como entre tantos pueblos de España, en absoluto se llamaba vascos a los cántabros, ni había tal conciencia. Las burdas apropiaciones ajenas del Partido Nacionalista Vasco, que intenta insuflar a sus esparcidos organismos, deforma y miente sobre la historia de la que, según dijo el malagueño Bernardo de Alderete en 1606, era “la gente más antigua, noble y limpia de toda España”. Y es que de hecho el vasco ha sido siempre un arquetipo de ser español. (3) 



-Como bien sabe y ha estudiado el profesor Manuel Fernández Espinosa, alma mater de nuestro proyecto “Raigambre”, la confusión creada por esta institución en el seno de las colonias vascas de Hispanoamérica, en especial desde los años 30 del siglo XX, es tragicómica.

Uno de los impulsores de este proyecto en el Perú decía que cuando ETA dejara de matar, se podrían librar de los “ataques españoles”. La Euskal Etxea, al no integrarse en los centros españoles, mantiene una estructura y una dialéctica de “otro país”, como si fuera una “nación oprimida” (Una de las zonas más ricas de España…); amén de que hijos y nietos criollos y mestizos se creen con derecho a esa supuesta nacionalidad vasca de pura cepa… En cambio, acto seguido, se reivindica la figura de Miguel Unamuno, un gran intelectual vasco que, sin embargo, calificó a Sabino Arana como “tontiloco”, y que era radicalmente opuesto al ridículo neologismo “Euskadi” y a todo lo que significaba el separatismo antiespañol. Unamuno siempre habló de “Vasconia”, y dijo que al ser vasco, era doblemente español.

Por otra parte, vemos, no sin obligado humor, que un señor a quien nombran nada más y nada menos que lehendakari de la Euskal Etxea no acierta a pronunciar nombres como “Aránzazu” o “Ezkioga”…
Por eso alertamos sobre las confusiones… Porque lo que no dicen las Euskal Etxea de Hispanoamérica es que en España, entre vascongados y navarros, se cuentan por trescientas mil las personas que han tenido que salir de su tierra bajo las presiones del terrorismo separatista, estando exiliados en otras regiones de su patria española. Es un caso vergonzoso y sangrante que no halla parangón en Europa. Y encima padecemos un “gobierno” que, al igual que el anterior, se caracteriza por el compadreo con los más sanguinarios terroristas, a quienes trata mejor que a las víctimas, a las que arrincona… Empero, Javier Arzallus, ex jesuita y conocido líder separatista, decía que mientras que unos movían el árbol, otros recogían las nueces… Y así seguimos, y encima, prolongamos el terrible problema.


-Cierto es que desde aquí, la Euskal Etxea no se hace una apología muy explícita del separatismo antiespañol, pero es más una cuestión de táctica que otra cosa, pues saben que en la América Hispana no calaría demasiado el tema y que aquí, los españoles somos “lo mismo” para el común de los habitantes. De hecho, cuando muchos contactan con españoles, perciben diferencias de acento y etcétera pero reconocen unos mismos rasgos sobre todo en el carácter. Aquí sin embargo, oculta su verdadero propósito, que es el de dar soporte político al Partido Nacionalista Vasco allende los mares, y sin embargo, al igual que las fantasmagóricas embajadas de los separatistas “catalanes”, el dinero para financiar estas instituciones sale de los impuestos de todos los españoles. Un país que está en una crisis brutal, cada vez más fragmentado y presionado por la oligarquía, y que sin embargo, sigue sufragando a quienes quieren destruirlo, y encima llegando a gente que no se entera de qué va la película. Un servidor, como andaluz, tiene mucho más en común con un vascongado o un navarro que tantos criollos y mestizos que tienen alguna ascendencia, tan repartida por el Nuevo Mundo desde los primeros días de la Conquista, símbolo inequívoco del aporte vasco al conjunto de las Españas.


-El “Gernikako Arbola” (Árbol de Guernica), precioso poema que nació para ser himno y que tanto manipula el PNV y su Euskal Etxea, fue compuesto por el bardo carlista José María de Iparraguirre, aquél que dijo: "¡Ara España! ¡Lur hoberikan ez da Europa guziyan!”, esto es: “¡Ahí está España! ¡Tierra mejor no la hay en Europa entera! “. La preciosa letra al legendario árbol sobre el cual juraban los fueros los reyes españoles nada tiene que ver con el nacionalismo, engendrado por la doctrina liberal, el voluntarismo, el racismo, el odio, la “autodeterminación” que predicó en su día el imperialismo anglosajón para luego agrandar sus colonias y dividir Europa…. No, esos versos son de un amante de la Tradición y de un soldado del carlismo, esto es, el legitimismo español, el movimiento político más antiguo del Viejo Continente cuya primera muestra se dio en La Mancha, en 1833, y que tantos vascongados y navarros suscribieron en amor a todas las Españas.

Por ello insistimos en que la Euskal Etxea no es la casa de los vascos, porque no todos los vascos son separatistas, ni fue así en el pasado ni es así en el presente. Y encima, toma un legado del movimiento más genuinamente españolista…



-Sea como fuere, todo este injusto embrollo tiene un facilón resumen: ¿Cómo les sentaría a los hispanoamericanos que en España se crearan casas de partidos separatistas financiadas por sus propios estados?

Así las cosas, nos, al igual que el poeta Gabriel Aresti, decimos “Nire aitaren etxea, defendiduko dut!”, esto es, “¡defenderé la casa de mi padre!”; y como dice una canción carlista, ”Gora Euskalerría, tú, que eres vasco y noble, a España salvarás”. La casa de nuestros padres es España en singular y las Españas en plural, por la que tantos vascos en distintos frentes han peleado por tierra y mar a lo largo de la historia. Basta de destruir el presente confundiendo y manipulando el pasado; al contrario, hagamos que la verdad de lo mejor del pasado nos ayude a construir el futuro ante este tan oscuro presente que nos condena a la desmembración y la emigración; y que por supuesto, dentro de las casas españolas, haya casas vascas. Cosa que no es la Euskal Etxea, ni en Bilbao ni en Lima ni en ninguna parte.


Valgan como rúbrica los sentidos y sinceros versos de un servidor:


EL VASCÓN

Atavismo noble,
de leyenda ilustrada,
Se yergue el vascón,
Por toda España.


El caserío como núcleo,
de la tallada piedra,
la que es levantada,
con brío y fuerza.


Remoto pasado en marcha,
autóctono anterior al indoeuropeo,
labrado en bosques y mares,
como el más fértil astillero.


Hijo de la lucha y de la luna,
cotejando el sol desde los montes,
recio, austero y montaraz,
en los más sinceros horizontes.


Clamando a Jaungoikoa,
desde una atalaya de arcanos,
próspero, sencillo, laborioso,
forja de los manes hispanos.


¡Sigue nutriendo nuestro espíritu,
oh, vascón admirable,
que tu ser nos proteja,
con cerebro y con sable!








(1) Sobre el Sabino separatista:

La antología racista, xenófoba y etnicista de Sabino Arana - Libertad



(2) Sobre el Sabino arrepentido:

Sabino Arana - 1º racista - «españolista con toda el alma» vasco ...



(3) El vasco como arquetipo español:

El vasco como arquetipo español |


1 comentario:

  1. Encima el actual director del centro vasco de Lima, Perú, Raul Noblecilla Dominguez, andaluzzzzzzzzzzz, extremeño o no se que, funge de vasco, si ese es vasco yo soy ariooooo, dejense de ridiculeces, ese club solo sirve para comer y hacer negocios con los Ortuzar, que son los únicos interesados en pagar la cuenta del local, el agua y la luz, para hacer negocio... viva España y punto!

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