RAIGAMBRE

Revista Cultural Hispánica

domingo, 23 de noviembre de 2014

CATALUÑA Y EL MUNDO




Manifestación del 12 de octubre (día de la Hispanidad) del 2014 en Barcelona.
Imagen de noticias.lainformacion.com


Por Antonio Moreno Ruiz
Historiador y escritor


A propósito de los ultimos acontecimientos ocurridos con el llamado ‘referéndum’ separatista en Cataluña, son propios y extraños los que se preguntan (y en verdad no entienden) qué pasa en España. Ante esto las respuestas nunca son fáciles, pero creemos que hay que darlas, porque en esta suerte de prolongada agonía que parece que sufre España se impone el hablar claro. Y es que hasta el primer ministro británico Cameron intentaba poner cordura pidiendo la unidad de España, lo que nos da una idea de cómo está la situación.

Sea como fuere, vayamos por partes:

- Varios medios europeos y sudamericanos están propagando una falsa noticia en la que un supuesto 80% de los catalanes ha votado por la independencia. Esto es falso, básicamente porque ni tan siquiera un 30% de los catalanes han ido a votar, en una farsa ilegal, en la que encima se ha prohibido votar a los catalanes residentes en otras regiones de España, y donde han votado inmigrantes y menores de edad. Las urnas han estado abiertas varios días, según sus propios organizadores, y según hemos podido ver en muchas imágenes, hay gente que ha votado varias veces. Y aun así, ni al 30% ha llegado. ¿Cómo va a querer el 80% del pueblo catalán separarse de España?









-En verdad se entienden las palabras de Cameron después de lo que ha pasado en Escocia. Pero lo que Cameron y tantos otros no saben es que Escocia en modo alguno se compara con Cataluña. Por ejemplo, ¿Se imaginan que en Escocia se hubiera hecho un referéndum para la independencia de las islas Hébridas? Pues ese sería el paralelismo más serio que podría hacerse. Cataluña, al contrario de Escocia, jamás fue un reino independiente. Si se quisiera hacer un paralelismo de verdad, un remoto referéndum de independencia se tendría que hacer en la Corona de Aragón, esto es, las actuales regiones de Cataluña, Aragón, Valencia e Islas Baleares. Los separatistas catalanes hablan de la ficción de los “Països Catalans”, que nunca ha existido ni histórica ni cultural, e incluso ni siquiera lingüísticamente, pero sin embargo, jamás osarán plantear un referéndum por esas regiones que consideran de su propiedad, porque saben que lo perderían por goleada. Ni aragoneses, ni valencianos, ni baleares, así como la mayoría de los catalanes, quiere separarse de España, nuestra común y milenaria patria. Sin embargo, los separatistas catalanes, amén de emplear juego sucio en su terruño, quieren obligar y sin pedir opinión a otras regiones a lo mismo.

Volviendo a Escocia, ¿se imaginan ustedes que los separatistas dijeran que parte de Escocia ha de apropiarse también de Gales e Irlanda sin preguntar siquiera? Pues ese es el paralelismo más claro que pueden encontrar sobre esta cuestión.

Otrosí, ya que gustan tanto los paralelismos, ¿tendrá que romperse Suiza en mil pedazos por el hecho de albergar cuatro idiomas? No sólo en España se hablan varios idiomas, en verdad eso es así en casi toda Europa. En Francia también están el bretón, el provenzal y el corso, amén de focos de vasco y catalán. En Alemania hasta se habla el sorabo, una lengua eslava muy minoritaria, y en algunas zonas, el polaco, hablado por descendientes de inmigrantes de este país. En Italia está el sardo, el xeneize genovés, el napolitano… Y no digamos ciertos países de Europa del Este. ¿Y en Estados Unidos, que en algunas zonas ya se habla más español que inglés? ¿Y en el Perú, que amén de español, quechua y aymara, en la selva se hablan numerosas lenguas y dialectos? Y lo mismo del Perú se puede decir de todos los países ribereños del Amazonas. En el norte de África, además de un dialecto árabe que ya poco tiene que ver con el árabe clásico hablado más al oriente de Egipto, se habla el tamazight, la lengua bereber. ¿Y qué diremos del África Negra? ¿Saben estas almas de cántaro cuántas lenguas se hablan en China? ¡Hasta en Andorra se habla catalán y castellano!


O sea, que según el criterio separatista “catalán”, ningún país del mundo podría estar tranquilo…


-¿Razones históricas? Veamos cómo son los separatistas: En Andalucía, los llamados “andalucistas” dicen que todas nuestras desgracias se deben a una atroz conquista por parte de unos bárbaros del norte de la Península (entre los cuales se encuentran vascos y catalanes) que arrasaron un mundo islámico idílico. Sin embargo, los separatistas "catalanes" dicen exhortar a Jaime I el Conquistador, rey de Aragón que en el siglo XIII conquistó Valencia y las Baleares al islam, y cuya ayuda fue fundamental para tomar Murcia. Empero, los separatistas se dicen camaradas. Mas si fueran coherentes, estarían enfrentados, puesto que la doctrina “andalucista” critica a los “bárbaros del Norte”, entre los que están los catalanes… Pero por lo visto, el odio, la mentira y la sinrazón es más fuerte que el conocimiento. Sea como fuere, Jaime I el Conquistador, cuando quiso organizar una cruzada que finalmente no prosperó, dejó dicho: “Barones, ya podemos marcharnos, pues hoy, al menos hemos dejado en buen lugar el honor de toda España” (1). Y decimos esto porque según las fantásticas teorías de los separatistas, Cataluña fue un país independiente hasta 1714, en la que la dinastía borbónica se la anexionó por la fuerza, siendo que Rafael Casanova pasa a ser una especie de héroe nacional catalán tipo “Braveheart”. Sin embargo, por supuesto que por aquella época Cataluña formaba parte de la Corona de Aragón y no era independiente de España, y Rafael de Casanova, que luchaba porque el archiduque de Austria fuera el rey de España, dejó proclamado: : "(…) salvar la libertad del Principado y de toda España; evitar la esclavitud que espera a los catalanes y al resto de los españoles bajo el dominio francés; derramar la sangre gloriosamente por el rey, por su honor, por la Patria y por la libertad de toda España"; como bien recuerda una descendiente de Casanova (2), quien no gusta de que utilicen el nombre de su ancestro para falsear la historia, una historia que jamás ha existido más que en cabezas mentirosas. Porque lo que se vivió en España a principios del siglo XVIII fue una Guerra de Sucesión, en la que el archiduque de Austria no aceptó el testamento de Carlos II y, ayudado por Holanda y el imperio británico, se enfrentó a Felipe V, de la casa de Borbón, y rey legítimo de España por el cual lucharon con uñas y dientes vascongados (3) y navarros, a los cuales premió a conciencia.


Si seguimos en la historia, en la guerra contra Napoleón, los catalanes lucharon como un solo hombre con el resto de España. Tanto así que Agustina de Aragón, gran heroína de este conflicto, era en verdad catalana de pura cepa. Como dice José Javier Esparza (4): “Es muy evidente el caso catalán. Allí los franceses, apoyados en una minoría de elementos separatistas, ofrecieron incluso declarar el catalán lengua oficial para una Cataluña concebida como extensión del imperio napoleónico al sur de los Pirineos. Frente a la oferta francesa, la inmensa mayoría de la población catalana prefirió seguir defendiendo a España y, de hecho, después de la guerra aquellos separatistas tuvieron que abandonar el país como “afrancesados”. Recordemos que Agustina de Aragón era una catalana. Los catalanes se batieron igualmente en el Bruc, en Gerona y en otros muchos puntos, con partidas guerrilleras que se convirtieron en una pesadilla para los franceses. En Cataluña, como en el resto de España, la gente peleó por la religión, la patria, la corona y la libertad, y todo era para ellos una y la misma cosa, y todo respondía al nombre de España. Igualmente claro es el asunto en el País Vasco, donde, por cierto, la represión francesa fue muy cruenta desde el primer instante. También desde el primer instante fue clara la determinación de las juntas vascas de defender a España y a la Corona contra la invasión napoleónica. Y hacerlo, además, precisamente en nombre de su españolidad. Hay un documento irrefutable que es la proclama de la Junta de Vizcaya en el mismo año de 1808, apenas desencadenado el movimiento insurreccional contra los franceses, y que es un auténtico llamamiento a la unidad nacional española. Decía así:“Los vascongados a los demás españoles. Españoles: somos hermanos, un mismo espíritu nos anima a todos. Aragoneses, valencianos, catalanes, andaluces, gallegos, leoneses, castellanos, olvidad por un momento estos mismos nombres de eterna armonía y no os llaméis sino españoles. Recibid como prueba incontrastable del espíritu que nos anima, los holocaustos que ofrecen a la libertad española los Eguías, los Mendizábales, los Echevarrías y otros infinitos vascongados”.



Agustina Saragossa i Doménech, más conocida como Agustina de Aragón. Heroína catalana por la independencia de España frente a la invasión napoleónica. 
Imagen de www.tumblr.com



En esta misma época, los catalanes residentes en Cumaná se organizarían y lucharían a muerte para derrotar a las tropas bolivarianas, que querían separar a Venezuela y demás Españas Americanas de la patria común. Y lo harían con los numerosísimos canarios que luego llegaron a ser destacados jefes realistas, como también lo fue el asturiano José Tomás Boves.

 Y en la historia más contemporánea, cierto es que durante los primeros años del franquismo se fue injusto con las lenguas regionales, incluso en contra del criterio de mucha gente que no estaba contra el régimen. Pero pronto pasó, siendo que Cataluña fue la región que más prosperó con el franquismo, atrayendo a multitud de manchegos, aragoneses, murcianos, vascos, gallegos, extremeños, y sobre todo andaluces, para trabajar en su industria; industria que no tenían otras regiones de España, mucho más dependientes de recursos primarios. Y por supuesto, a Franco se le hicieron no pocos homenajes en catalán, de lo cual pasamos a poner ilustrados ejemplos:



  1. Barcelona recibe con entusiasmo a las tropas de Franco - www.dolcaCatalunya.com

    El nacionalismo catalán nos ha contado que la Guerra Civil fue un conflicto deCataluña contra "España", y que la Cataluña de ...



  1. Franco visita Cataluña

    http://catalibanes.blogspot.com/ No-Do sobre la visita de Franco a Cataluña en 1962 con motivo de las terribles inundaciones ...


  1. 1970 Visita de Franco a Barcelona - Catedral de Barcelona - Pedralbes - Cataluña

    • de Retroclips
    • Hace 6 meses
    • 5.317 visualizaciones
    1970 Visita de Franco a Barcelona - Catedral de Barcelona - Pedralbes - CataluñaRetroclips es un canal dedicado a recopilar ...







Placa en honor al general  Franco en catalán, en 1964


Las fotos no mienten: así agasajaba a Franco el Orfeó Català.

Franco Orfeó



El Barça ¿bastión de resistencia al franquismo? Condecoró ...





Y bueno, todo esto incluso nos lo podíamos haber ahorrado, puesto que antes de existir el nombre “Cataluña”, los francos llamaron a aquella tierra la Marca Hispánica, e “hispani” a su habitantes. Allí fue donde empezó a formarse la palabra “hispani-ol”, antecedente de nuestro gentilicio patrio. Y no en vano, del catalán proceden numerosas palabras que utilizamos en el castellano –vehículo comunicativo español y americano por antonomasia-, tales como “peseta”, “papel”, “avería”, “añoranza”, “butifarra”, “capicúa”, “linaje”, “rol”, “reloj”, “turrón”, y tantas y tantas otras (5).


-Así las cosas, muchos, con toda legítima lógica, se podrán preguntar que cómo es que, estando la historia tan clara, han calado tantas mentiras en una región como Cataluña, que hasta hace muy poco era el motor industrial de España. Es una de las muchas cosas que no se entiende… Y es que poca gente puede entender que en 1978, el régimen encabezado por Juan Carlos y Adolfo Suárez, estableciera una ley electoral indigna e injusta como la Ley D´Hondt, que no significa “un hombre, un voto”, sino que se rige por un engañoso recuento de circunscripciones y proporcionalidades. En un sistema de distritos electorales como el británico, esto es, candidato por cada cien mil habitantes con obligación de tener una oficina en el territorio, y donde el voto es uno, entonces el separatismo no habría salido nunca de ser una minoría. Pero resulta que el separatismo se sirve de un sistema de circunscripciones donde partidos que tienen 300.000 votos tienen más diputados que partidos que superan el millón de votantes. Además, por ley, el Estado subvenciona a los partidos políticos, además de sindicatos y empresarios. Esto es: Los separatistas se sirven de un sistema electoral injusto y de los impuestos de todos los españoles para, asimismo, imponer un sistema educativo demencial donde no se puede estudiar en castellano, un idioma que compartimos más de cuatrocientos millones de personas, y que es la lengua materna de la mayoría de las familias catalanas. Además, a eso se añade a que en en el sistema de comunidades autónomas, cada región estudia una geografía y una historia distintas, y todas, con hechos diferenciales inventados… Y encima, recibiendo subvención del Estado. Porque, por si no lo saben, las fantasmagóricas “embajadas catalanas”, así como las “euskal etxeas” (6), esto es, las sucursales del separatismo “vasco”, también reciben subvenciones estatales; del mismo Estado que en Lima, la capital del Perú, financia a las asociaciones homosexualistas y exposiciones donde se presenta a Santa Rosa de Lima como un travesti (7); mientras que miles de jóvenes licenciados españoles se ven obligados a emigrar, sin posibilidades de pronto regreso.

Toda la oligarquía separatista “catalana” está imbuida en tragicómicos casos de corrupción, en cuentas en paraísos fiscales, en favores y tratos con mafias, etcétera. Y sin embargo, lo único que se les ocurre, ante una Cataluña donde el nombre “Mohamed” comienza a ser más común que “Jordi”, donde la delincuencia, la inseguridad y el desempleo son galopantes, a la par que el islamismo crece como la espuma; pues montan un “referéndum” que, más que recordar a la genuina Cataluña, esto es, región modelo en todo el Mediterráneo, recuerda a un espectáculo tercermundista, en cuyas falsas urnas se veían desde niños hasta hiyabs. Una desfiguración total de uno de los máximos puntales de España.

Y es que como ven, los hechos son demasiados tozudos.

Para terminar, sólo me queda decirles a los amigos extranjeros lo que, con toda razón, tanto me preguntan: Díganme qué pensarían si en sus países un movimiento separatista regional recibiera financiación del Estado, el cual tiene un sistema electoral que les beneficia continuamente frente a partidos que tienen hasta tres veces más votos; que tuvieran fantasmagóricas embajadas pagadas con el dinero de todos ustedes, y que contra las leyes estatales, organizaran un referéndum donde les prohibirían el voto a los naturales residentes en otras ciudades y sin embargo, votaran, amén de menores de edad y amén de varias veces los mismos, inmigrantes recién llegados. Y que aun así, ni la tercera parte de la susodicha región hubiera ido a esta farsa y que sin embargo, buena parte de la prensa dijera que el 80% de los habitantes ha votado por la independencia. ¿Cómo se sentirían ustedes?

En fin, así está Cataluña ante el mundo entero. En cambio, aunque el corrupto Estado la abandone, la marea de catalanes de bien crece y se consolida, gracias, entre otros, al movimiento Somatemps, que viene avalado y dinamizado, entre otros, por el profesor Javier Barraycoa (8). La Cataluña real, cargada de pueblo y tradición, está a flor de piel y no aguanta más que se manipule su nombre por parte de corruptos llenos de mentira y odio; y acaso está destinada a liderar una sana, justa y necesaria reacción en una España castigada por todos lados. Ojalá que así sea, porque como dijo Juan Vázquez de Mella, el gran tribuno de la tradición española: “Después de un primero de mayo terrible, vendrá un dos de mayo más glorioso que el de 1808” (9).





Imagen de elmatinercarli.blogspot.com





(1)Véase: Jaime I, «el Conquistador - Gran Enciclopedia Aragonesa




(2)Véase: Una descendiente de Rafael Casanova: "Él era un patriota ...




(3) Entre ellos el guipuzcoano Blas de Lezo, quien a posteriori humillaría a Inglaterra y sus colonias en Cartagena de Indias, ante un intento invasor terrible, un desembarco sólo superado por el de Normandía en la Segunda Guerra Mundial. En contra de lo que algunos dicen, Blas de Lezo no luchó sólo por “responsabilidad nacional”, pues eso no existía (la nación-estado no existía, mejor dicho), sino que luchó por su rey y contra la usurpación venida de Austria y con ayuda británico-holandesa.



(4)Véase: España no nació el 2 de mayo - El Manifiesto




(5) Para mayor información, sígase: Palabras de origen catalán en el castellano - Hispanismo.org




(6) Véase:la euskal etxea no es la casa de los vascos - raigambre




(7) Véase: Urgente convocación: ¡protestemos contra infame ...




(8) Sobre Somatemps:

SOMATEMPS | secretaria@somatemps.com


Sobre Javier Barraycoa:

Javier Barraycoa | - DolcaCatalunya




Javier Barraycoa, autor de 'Cataluña Hispana ... - YouTube






Imagen de www.periodistadigital.com



(9) Sobre Juan Vázquez de Mella: Juan Vázquez de Mella - Portal Avant!

sábado, 22 de noviembre de 2014

TEOLOGÍA DE LA LIBERACIÓN


Dominicos holandeses, en defensa de Leonardo Boff, protestan aprovechando el viaje de Juan Pablo II a Holanda en 1982.


 
 
 


El caso de la ex-Universidad Pontificia Católica del Perú destaca, como en el fondo de un cuadro, el problema de la sedicente "Teología de la Liberación", recientemente puesta sobre la mesa también por algunas declaraciones de altos prelados en Italia. Puede ser que no sea perfectamente conocida, sin embargo la Teología de la Liberación ha desempeñado un papel principal en la reciente historia hispanoamericana. He aquí un dossier que, de modo necesariamente sintético, nos introducirá en los vericuetos de esta corriente revolucionaria, condenada por el Vaticano en el año 1984.
 

Texto de Julio Loredo.

Traducción del italiano al español: Manuel Fernández Espinosa
 
 
 
Las doctrinas que después vinieron a constituir la Teología de la Liberación fueron debatidas en el curso de varios encuentros internacionales allá en los años sesenta. Entre ellos particularmente emblemático fue el mantenido en Cuba el mes de agosto de 1965 bajo la égida de Fidel Castro.
 
 
 
La expresión ya había sido empleada en 1959 por el teólogo de la liberación uruguayo Juan Luis Segundo, fue popularizada por el sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez Merino, reputado por esa razón como "padre fundador" de la corriente, en el curso de un congreso del ONIS (Oficina Nacional de Información Social) en Chimbote, Perú, allá por el mes de julio de 1968. Gutiérrez en la práctica difundió y actualizó la tesina de licenciatura que, bajo la dirección de Henri de Lubac, presentó en la facultad jesuita de Lyon-Fourvière y más tarde publicó como libro, bajo el título "Una Teología de la Liberación. Perspectivas", convirtiéndose así en un hito de esta corriente: "Este libro -comenta Segundo- ha sido como un bautismo. Pero el niño estaba ya bien crecido".
 
 
 
 
Estamos en la víspera de la I Asamblea General del CELAM (Conferencia Episcopal Latino Americana en Medellín, Colombia), en la cual los exponentes de la corriente liberacionista tuvieron un papel crucial. La presencia del Papa Pablo VI confirió con posterioridad una autoridad al encuentro, en otros lugares se le empezó a denominar "el Vaticano II de la Iglesia latino-americana" y se presumía que habría producido un "giro copernicano" en el continente.
 
 
 
 
De hecho es considerado un acontecimiento que divide las aguas en la historia de la Iglesia en Iberoamérica, que finalmente habría roto por fin con su pasado "medieval", lanzándose a la aventura progresista. Más allá del verdadero tenor de los documentos, el "espíritu de Medellín" comienza a soplar fortísimo y decanta cada vez más a amplios sectores eclesiásticos a la izquierda.
 
 

Este 68 eclesiástico se conectó, por lo tanto, con un proceso político revolucionario que, bajo la influencia de Cuba, vio pasar a la órbita soviética a un cierto número de países. En cambio, en aquellos países con gobiernos no comunistas, lo que logró la Teología de la Liberación fue empujar a los católicos a la oposición, incluso armada.
 
 
En Colombia, por ejemplo, emulando a Camilo Torres Restrepo, un cierto número de sacerdotes se unieron al grupo guerrillero ELN (Ejército de Liberación Nacional), autodefinido como "marxista-leninista-cristiano" (sic).
 
 
 
 
Es en este clima sobrecargado que sale a la luz, en 1971, la obra maestra de Gustavo Gutiérrez "Una Teología de la Liberación. Perspectivas".


 
 

 
 

Camilo Torres Restrepo (1929-1966), sacerdote católico y miembro el ELN (Ejército de Liberación Nacional); pionero de la "Teología de la Liberación".
 
 
 
"HACER TEOLOGÍA"

¿Cuáles son las coordenadas de esta teología?
 
 

Invirtiendo el método teológico -que parte de la Revelación contenida en las Sagradas Escrituras y en la Tradición para deducir principios después aplicados a la realidad- los teólogos de la liberación toman como punto de partida el análisis de situaciones concretas, partiendo de la casuística de las luchas revolucionarias en Iberoamérica. "La teología de la liberación-dice Gutiérrez- es una tentativa de comprender la fe partiendo de la praxis histórica concreta, libertadora y subversiva, de los pobres de este mundo."
 
 
 
 
 
La inversión se realiza siguiendo este razonamiento:
 
 
 
 
- La Revelación pública no ha concluido con la muerte del último Apóstol, sino que continúa a lo largo de la Historia y, más bien, en la Historia (inmanentismo historicista).

- Concretamente, Dios se revela en aquellos fenómenos que están a la vanguardia del proceso histórico, valga decir en los movimientos revolucionarios (socialismo, comunismo), eufemísticamente llamados "movimientos de liberación".
 

- Para analizar estos fenómenos sirve un instrumento de análisis político y sociológico.
 
 

- Hoy, el mejor instrumento de análisis es el marxismo.
 
 
 

"El marxismo, como marco teórico de todo el pensamiento filosófico contemporáneo no puede ser superado", aseveraba el P. Gustavo Gutiérrez. "Hoy, por la teología de la liberación -explicó a su vez a Luis Alberto Gomes de Souza- no existe instrumento mejor que el marxismo, que está inmerso en la praxis de la realidad."
 
 
 
Los teólogos de la liberación adoptaron por lo tanto el análisis marxista, lo aplicaron a los fenómenos sociales y políticos, para después vender las conclusiones -obviamente condicionadas por el método de análisis- como "teología"...
 
Por otra parte, la Teología de la Liberación no se presentaba como una escuela de pensamiento (ésto sería un "intelectualismo" absolutamente rechazable), sino que se presentaba como una "praxis" y, concretamente, un praxis revolucionaria. "La teología de la liberación supone una situación revolucionaria", explicó el liberacionista Gregory Baum. "Lo que entendemos por teología de la liberación es la implicación en el proceso revolucionario", sentenciaba Gustavo Gutiérrez.
 
 
He aquí por qué los teólogos de la liberación hablan de "hacer teología", alabando la "primacía de la praxis sobre la reflexión", un concepto de clara derivación marxista (la undécima "Tesis sobre Feuerbach"). "Antes de hacer teología tenemos que luchar por la liberación-escribieron los hermanos Leonardo y Clodovis Boff-. El primer paso de la teología es la involucración en los procesos de liberación de los oprimidos."





 
 
  
El marxista Roger Garaudy y el Obispo "liberacionista" Hélder Câmara
 



LA SIMBIOSIS CON EL COMUNISMO

 

Movidos por el deseo de "hacer teología" tomando parte en los procesos de "liberación", los secuaces de esta corriente empezaron a implicarse en las luchas políticas de la izquierda, a veces como protagonistas y a veces como partidarios. No pocos llegaron incluso a participar en la lucha armada. La maniobra les resultó fácil, dado que compartieron con Moscú el mismo objetivo: la instauración del comunismo.
 
 
"Comunismo y Reino de Dios sobre la tierra son la misma cosa", afirmaba el P. Ernesto Cardenal. "Encontramos los valores del Reino de Dios en el socialismo real soviético", encarecía a su vez fray Leonardo Boff.
 
 
 

El mismo Gustavo Gutiérrez era todavía más explícito: "Debemos hacer una revolución social que rompa el status quo e introduzca la nueva sociedad, la sociedad socialista".


 
 
 

FUENTE ORIGINAL DEL TEXTO ITALIANO: ASSOZIACIONE TRADIZIONE FAMIGLIA PROPIETÀ

NOTA DEL TRADUCTOR:

Para este mismo tema, en español, recomendamos el libro "La hoz y la cruz", de D. Ricardo de la Cierva, Editorial FÉNIX, Madrid, 1996, 794 páginas. En el enlace una recensión del mismo (aquí).

jueves, 20 de noviembre de 2014

LA CIENCIA ADORADA

Por Antonio Moreno Ruiz
Historiador y escritor


Imagen de diepresse.com



Stephen Hawking dice que Dios no existe, y claro, los supuestos ¿adoradores de la ciencia? se escudan en él como palabra divina. Ni una fatwa islámica, oigan.

Empero, no sabía yo que Hawking también era teólogo y filósofo...

Otrosí, ¿sabe Hawking como curar la depresión, el cáncer o el ébola? ¿No, verdad? Porque eso no lo enseñan en astrofísica. Pues entonces, ¿por qué su opinión sobre la religión ha de valer más que cualquier otra? Como decía el rockero Silvio QEPD: El que sabe del Betis llega hasta el Betis, el que sabe de Europa llega hasta Europa, el que sabe del Rocío, llega hasta el Rocío.

Y de todas maneras, a todos aquellos que dicen escudarse en una infalible ciencia que todo lo puede y lo arregla: ¿Saben lo que decía la ciencia oficial hasta la Segunda Guerra Mundial, acerca del racismo y la eugenesia? Me temo que no, porque entonces, sabrían que los nazis fueron tímidos en comparación con el mundo angloliberal en cuanto a racismo, eugenesia y demás barbaridades; empezando por el hijo de Darwin, entusiasta apologista de las tristemente célebres esterilizaciones; las mismas que aprobó el estado de Virginia en 1929 con el mayor ¡consenso democrático! (ohhhh palabras mágicas) posible.

Así las cosas, damas y caballeros, con respecto a la existencia de Dios prefiero a San Agustín de Hipona antes que a Stephen Hawking, y como hijo de la tradición grecolatina, sigo el lema Fides et Ratio (fe y razón, ya que nos desterraron el latín…), sin excluir las partes del todo.



Imagen de line.do



Naturalmente que la ciencia ayuda a muchas cosas, pero todavía queda mucho, pero mucho por hacer y por descubrir. ¡Si apenas sabemos qué hay en los mares! Y aparte, ¿no es incoherencia que los que no creen en valores absolutos busquen la infalibilidad en algo que todavía muestra tantas lagunas, aun a pesar de sus avances?

Espero, naturalmente, que la tolerancia de los obsesos del progreso me deje elegir; y elijo que la opinión de Hawking sobre Dios sea tan inválida como la ley eugenésica y liberal que vio la luz en Estados Unidos y como tantas otras teorías pretenciosamente “científicas”, incluida la ridícula lucha de clases del marxismo.

miércoles, 19 de noviembre de 2014

LOS RESORTES ECONÓMICOS DE GREENPEACE




OPINIÓN: GLOSARIO DESCIFRADOR
GREENPEACE Y EL SABOTAJE

 
 
Manuel Fernández Espinosa
 


Los recientes incidentes protagonizados por Greenpeace, saboteando las prospecciones petrolíferas que se realizaban en aguas españolas próximas a las Islas Canarias no pueden comprenderse sin las estrechas relaciones que la asociación ecologista internacional tiene con la plutocracia petrolera. Y es éste un dato muy poco conocido por la opinión pública.
 
Greenpeace fue fundada por unos norteamericanos en Canadá, corriendo el año 1971 y la sede de su Consejo Directivo está en Amsterdam. Su activismo es sobradamente conocido mundialmente. Sin embargo, sus fuentes de financiación (aunque se conocen) gozan de menos publicidad.
 
Si reparamos en los generosos patrocinadores de Greenpeace nos haremos con una clave para comprender sus actuaciones que, lejos de ser lo que la ingenuidad general considera heroicos esfuerzos en la defensa de la naturaleza, no dejan de ser en no pocas ocasiones calculadas operaciones de sabotaje contra intereses industriales.
 
Si atendemos a sus principales donantes encontramos que, durante al menos ocho años, los Rockefeller han financiado a Greenpeace con más de 1.150.000 de dólares. Y no puede ocultársele a nadie que el famoso clan Rockefeller (que es decir la plutocracia con menos escrúpulos) fundaron Standard Oil, compañía que trató de concentrar el monopolio mundial del petróleo. ExxonMobil Corporation, también rockefelleriana, es la petrolera más poderosa del planeta.
 
Con este dato ya tiene el lector bastante para hacerse una idea de lo interesada que está Greenpeace por el medio ambiente.
 
Para un más exhaustivo análisis de los sustentáculos económicos de los que depende Greenpeace sugerimos que se vea este artículo: Destripando a Greenpeace. La gran estafa de esta ONG internacional.   

martes, 18 de noviembre de 2014

"LOS LOBEZNOS", NOVELA DE JOSÉ JIMÉNEZ LOZANO

 
 
UNA NOVELA SOBRE LAS CLOACAS DE LA TRANSICIÓN

Manuel Fernández Espinosa
 
A mi juicio, el escritor abulense José Jiménez Lozano (Langa, Ávila, 13 de mayo de 1930) es, con Aquilino Duque, el mejor prosista español contemporáneo. Ambos son dos escritores que, a diferencia de otros escritores de relumbrón, merecen ser leídos.
 

Mi relación con Jiménez Lozano se remonta a unas décadas, cuando una amiga mía (que en paz descanse) me dejó uno de sus libros de relatos. Mi amiga era de Fontiveros (muy cerca de Langa, el pueblo natal del escritor castellano) y lo conocía personalmente. Mi querida amiga me lo encareció mucho en su bonhomía y su sencillez y a punto estuve de poder conocerlo personalmente, pero no pudo ser. La lectura de aquellas páginas me dejó tan buen sabor de boca que, a partir de aquel, siempre que vi un libro del maestro langaruto lo compré y lo leí.
 
 
Su prosa es de una sabrosa sencillez; en algunos de sus libros no puedo estar en modo alguno de acuerdo ideológicamente: dígase por caso, "Historia de un otoño" (donde ensaya una apología de los jansenistas) y creo que, por su circunstancia histórica y cultural, Jiménez Lozano es uno de esos españoles embaucados por las pamplinas de Américo Castro, con toda su mitología filojudaica y filomahometana. Sin embargo, estilísticamente es impecable: sobrio, exacto... Castellano. Pero, hasta la presente, le había leído novelas con ambiente bíblico ("Sara de Ur") o histórico ("Historia de un otoño" o "El mudejarillo"...). La novela que recientemente he leído está ambientada en una época mucho más cercana: la transición española. Su título: "Los lobeznos" y es del año 2000. Estilísticamente, me ha molestado un poco la proliferación de "laísmos" (y aquí hay que decir que, tratándose de Jiménez Lozano, esto no puede ser cargado a ignorancia, sino que habría que pensar que con ello se plasma la idiosincrasia mesetaria).
 

Se trata de una novela bien construida (algunos la llamarían "thriller político") que, a la vez que mantiene al lector en vilo, constituye toda una profunda reflexión sobre la política y sus miserias. En esta novela vemos el modo como muchos franquistas se reciclaron, dejando a un lado su pasado en los cuadros de mando del llamado Movimiento Nacional, para devenir demócratas por el sindicato de las prisas. Jiménez Lozano pinta las postrimerías del régimen franquista. Se adivina un régimen que ha arrinconado los valores heroicos y viriles sobre los que se fundó: todo ha quedado en retórica de interiores (Patria, Imperio, Águilas, Cruces de Borgoña, Flechas y Yugos), los falangistas y los requetés, verdaderos vencedores de la Guerra Civil, han sido ninguneados por el régimen y su presencia en el poder se limita a lo testimonial y simbólico. No obstante, se han aupado grupos que se autodenominan "católicos", pero que tienen la manga muy ancha en lo moral (que han rebajado la moral a una cuestión de guardar las apariencias) y es en esos antros farisaicos en donde se está reclutando a los hombres que figurarán en la España democrática que se delinea, tras la muerte del Caudillo.
 

Es ahí donde es captado para ser figurón del sector democratacristiano un cargo franquista, Leopoldo Cháñez. Leo ha ido ascendiendo desde la covachuela a los despachos ministeriales, haciendo carrera como gestor público en deportes. Leo no padece la transición, puesto que se amolda a los cambios y prosigue su carrera política, hasta que llega a un punto muerto y se retira. No obstante, a su alrededor tiene a todo un grupo de jóvenes que lo alientan a retornar a la arena política, siempre dispuestos a medrar a costa de lo que sea: los lobeznos. Cuando se retira a su finca, Leo constituye una especie de cabildo (lobby, grupo de presión) que trata a todo trance de auparse al poder. Sin embargo, cuando menos lo piensa, resulta que se inicia una campaña de acoso y derribo de su figura pública, deslizándose una serie de sospechas que cuestionan su moralidad sexual. Leo está casado con Cuca, pero como si no lo estuvieran. Poldo es el chófer de Leo (un pariente del pueblo que le salvó la vida de pequeño: ambos se llaman Leopoldo) y es uno de los personajes más interesantes de toda la novela, por su nobleza y lealtad. Agustín Haro es la eminencia gris del grupo de Leo Cháñez... Son algunos de los personajes que cobran mayor relieve y protagonismo. No quiero olvidar tampoco al ideólogo sudamericano que contrata Cháñez: un intelectual ecléctico que combina marxismo y liberalismo en dosis convenientes.
 

Si algún día hubiera que escoger algunas novelas del siglo XX, para formar una colección que fuese algo así como aquellos galdosianos Episodios Nacionales (pero de la España del siglo XX) "Los Lobeznos" sería idónea para ilustrar esa inmunda cloaca de la política sin ideales, de la política en su más innoble y bastardo de los sentidos, la política que se fue configurando en el meso y tardofranquismo, con personajes de dudosa honorabilidad que, traicionándolo todo, se montaron en el tren que nos ha traído a esta España descoyuntada y decrépita. Sería muy aventurado dictaminar que los personajes de esta novela correspondan a personalidades históricas, fallecidas o todavía vivas, de la democracia española (se trata, no lo olvidemos, de una ficción), pero están tan bien perfilados que podría decirse que nuestra transición la hizo gente como Leo Cháñez, Haro o Sotero.
 

La moraleja que puede sacarse de "Los Lobeznos" es que la política es como el diablo: promete mucho (también a los ambiciosos) y cumple poco.
 
 
Portada de "Los Lobeznos", de José Jiménez Lozano, Editorial Seix Barral, 224 páginas
 
 
 

lunes, 17 de noviembre de 2014

APORTACIONES AL DEBATE SOBRE UCRANIA



Tanques de


APORTACIONES AL DEBATE SOBRE UCRANIA

José Alsina Calvés
 

Desde hace días hay un intenso debate en las redes sociales y en los foros de Tribuna de Europa sobre los acontecimientos de Ucrania. Con este artículo pretendo hacer alguna aportación al mismo desde el ángulo de la geopolítica.

Es evidente que los militantes de grupos nacionalistas han tenido una participación notable en los acontecimientos, y han sido sin duda la “fuerza de choque” del movimiento opositor. Estos sectores nacionalistas pertenecen a la parte occidental del país, que siempre ha sido pro-occidental y anti rusa. Desconozco los planteamientos ideológicos de estos grupos, pero sospecho que confunden ser anti-ruso con ser anticomunista, olvidando que en la actualidad Rusia ya no es la URSS. Su consigna es construir una Ucrania independiente tanto de la UE como de Rusia.

Pero no hay que olvidar que junto a estos sectores nacionalistas hay fuerzas políticas neoliberales y partidarias de la integración en la UE, con lo que todo ello comporta. De momento son estas fuerzas las que han tomado el poder.

Planteo dos preguntas:

1-      ¿Tienen alguna posibilidad estas fuerzas nacionalistas de imponerse a los liberales y tomar el poder?

2-      En caso afirmativo ¿tiene alguna posibilidad geopolítica esta Ucrania no integrada en ninguno de los dos bloques?

Ignoro la respuesta a la primera pregunta. No tengo elementos para valorar el equilibrio de fuerzas, pero vamos a ser optimistas, y suponer que los nacionalistas logran imponerse. De entrada ello supondría la secesión, o al menos el intento, de las regiones orientales, cultural y lingüísticamente ruso fonas.  No olvidemos que Ucrania es un país relativamente reciente y bastante artificial. Alexander Dugin, en La cuarta teoría política ya advierte de la inestabilidad ucraniana y las muchas posibilidades de fractura.

Las posibilidad de viabilidad de esta Ucrania no integrada en ninguno de los dos bloques (UE o alianza con Rusia) son prácticamente nulas. Esto hace muy improbable la posibilidad de toma del poder por parte de los nacionalistas, y, en caso de conseguirlo, todavía más improbable de mantener su consigna de una Ucrania independiente.

En el momento actual, Rusia es la única potencia capaz de oponerse al mundialismo y al mundo unipolar dirigido por Estados Unidos. Hay fuerzas muy poderosas interesadas en que Ucrania entre en la UE. Para la propia UE es una extensión de su influencia mundialista (falsamente europea). Para los Estados Unidos significa debilitar al bloque formado por la Rusia de Putin y sus aliados. No olvidemos que sin el poder de este bloque, Siria habría caído hace tiempo en manos de los terroristas títeres de Arabia Saudí (a su vez títere de Estados Unidos).

Resulta muy curiosa la versión que los medio de información del sistema  (empezando por la TV3) han ido dando del proceso ucraniano. En ningún momento han utilizado las expresiones “extrema derecha”, “neofascistas” o “neonazis” para referirse a los militantes nacionalistas. Únicamente hablan de opositores “radicales” y “moderados”. Resulta sorprendente teniendo en cuenta la facilidad con que cuelgan esta etiqueta a cualquiera que se oponga al sistema.

Mi conclusión es que los nacionalistas ucranianos han actuado de fuerza de choque de la oposición liberal, pero que van a participar poco o nada en el poder. Dentro de poco veremos a Ucrania integrada en la UE, y, a lo peor, estos nacionalistas fuera de la ley si se oponen al proceso. Ignoro cuál será la actuación rusa

 Artículo originalmente publicado el 27 de febrero de 2015 en TRIBUNA DE EUROPA.

domingo, 16 de noviembre de 2014

ESCRITORES SOVIÉTICOS POR EL ORDEN NATURAL

Leonid Leonov


DOS OPINIONES DEL AUTOR RUSO LEONID LEONOV
 
Manuel Fernández Espinosa
 
Leonid Maximovich Leonov nació el año 1899 y falleció en 1994. Es uno de los más notables novelistas soviéticos y, con mucha probabilidad, el legítimo heredero de Dostoyevski, en la profundidad que muestra en el análisis del tormento psicológico de sus personajes y en las complejas tramas argumentales de sus novelas. El padre de Leonid, Maxim Leonov, fue un poeta autodidacto que perteneció al grupo Sreda de Moscú, entre cuyos miembros figuraban Maxim Gorki y Leonid Andreyev, entre otros grandes literatos rusos. Queremos citar algunas de las obras más sobresalientes de toda la producción literaria de Leonid Leonov: "Sota", "Skutarevsky", "Doroga na okean", "Russky Les". Fue un autor que, sin rebajarse al servilismo más abyecto, mereció las más altas distinciones de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, por la calidad de sus elaboradas novelas. Entre los galardones y medallas le fue concedido el Premio Stalin, el Premio Lenin, la Medalla al Héroe del Trabajo Socialista. Como es obvio, su obra apenas se conoce en España, donde siempre estamos más atentos a todo fenómeno cultural corruptor y desintegrador. En una entrevista que concedió Leonov, en Zagrev, publicada en el periódico croata "Vjesnik u Srijedu", el autor soviético expresó sus opiniones y, de entre todas ellas, queremos destacar y dar a conocer dos comentarios suyos que muestran la salud mental, el respeto religioso y la reciedumbre moral de algunos soviéticos:
 
CONTRA UN MUNDO DE IMPUREZA Y PECADO NEFANDO, QUE ATRAE EL CASTIGO DIVINO
 
"En una reunión de escritores de muchos países, celebrada en Leningrado, discutiendo sobre la novela dije: "El mundo vive actualmente en pecado. Levantamos la mano contra los "tabúes": contra la maternidad, contra la justicia y contra la pureza del alma. No obstante, sin estos valores no se puede vivir, sobre todo hoy, en la época de las máquinas. Las máquinas son robots que nos van a aniquilar, si no somos capaces de llevar una vida pura. Cuando ocurrían cosas parecidas, en la época bíblica, el Señor envió la lluvia de fuego sobre Sodoma y Gomorra." Eso dije en Leningrado, pero en Francia e Inglaterra tradujeron que "Leonid Leonov acusa a Occidente por su literatura sodomítica"."
 
EL OCCIDENTE CAPITALISTA REBAJA LOS MÁS EXCELSOS TEMAS DEL ARTE TRADICIONAL A LA INSOPORTABLE BANALIZACIÓN DE LO VULGAR
 
"No soporto que del "Ave María" hagan twist; con esta oración en los labios, nuestros antepasados crearon grandes obras de arte. No digo esto por ser un gran creyente, sino por que existen obras serias con las cuales nadie tiene derecho a relacionarse de una manera indigna."
 
Así se pronunciaba un escritor soviético. Ya quisiéramos que en el Occidente demoliberal y capitalista hubiera escritores con esta clarividencia.

viernes, 14 de noviembre de 2014

THOMAS BERNHARD: EL PANTEISMO DESINTEGRADOR

Thomas Bernhard, sentado al aire libre.
 
 
TRASTORNO Y EXTINCIÓN EN THOMAS BERNHARD
 
 
Manuel Fernández Espinosa
 
 
 
Thomas Bernhard (1931-1989) es escritor peculiar. Su vida no fue fácil y en su obra se atestigua el asco que le producía la sociedad burguesa y la tradición, profesando la iconoclasia y asestando golpes furibundos contra el Estado y la religión (y, como austriaco, contra la Iglesia católica). Su obra ha sido traducida al español por Miguel Sáenz. Hubo un tiempo en que Thomas Bernhard desataba en los círculos intelectuales que lo leían acerbas aversiones lo mismo que esa cándida admiración que la progresía rinde a todo iconoclasta por el solo hecho de hacer ejercicio de iconoclasia.
De toda su producción literaria (escribió mucho) merece la pena destacar “Trastorno” (1966) y “Extinción” (1986). En ambas se encuentra lo mejor (y lo peor) de Bernhard. Sus lectores más fieles encuentran en “Extinción” la afinidad del autor con el anarquismo y muchos no salen satisfechos tras leer “Trastorno”. La prosa de Bernhard es reiterativa y eso supone una dificultad añadida al lector que se inicia en su lectura.
Sin embargo, los protagonistas de "Trastorno" y "Extinción" tienen muchos puntos en común. En “Trastorno” el protagonista irrumpe ya avanzada la novela, después de habernos paseado por distintos escenarios en los que se nos presenta la sordidez y la decrepitud de los enfermos; los que visita un médico de cabecera rural al que acompaña su hijo, que es el narrador. Sin embargo, el protagonista no es ni el médico, ni los enfermos ni el narrador, sino un noble que habita en el castillo de Hochgobernitz, el Príncipe Saurau. En “Extinción”, el protagonista y narrador es Franz Josef Murau, un aristócrata cosmopolita que ha abandonado el Wolfsegg de sus orígenes.
Ambos personajes principales tienen en común su procedencia aristocrática, pero también su obsesivo soliloquio que puede o no tener oyentes, pero que cuenta -por supuesto- con el lector que se atreva a terminar el libro. El Príncipe Saurau y Murau son dos personajes desarraigados que no pueden ocultar su desprecio y hasta su odio por sus familiares. Murau se ha instalado en Italia, abandonando su Austria natal. Saurau vive enredado en su laberinto psicótico en el castillo de sus antepasados, rodeado por una parentela con la que apenas se relaciona, a la que detesta y provoca, bordeando el suicido. Wolfsegg y Hochgobernitz son dos ámbitos de origen a los cuales sus respectivos protagonistas aman y odian. Superficialmente el cosmopolitismo parece tener en Bernhard un apologeta que, en su desarraigo, produce con su verborrea un discurso que, en la voz de su protagonista o personaje narrador que ejerce de amanuense, execra el lugar de origen y la condición de pertenencia a ese lugar, a cualquier lugar: Wolfsegg o Hochgobernitz. Las razones profundas de esa apuesta a favor de la ciudad contra el ambiente rural (por más principesco que éste pueda ser) nace de un profundo malestar cultural: es la Naturaleza la que abruma al hombre y el odio contra el lugar de origen de los personajes bernhardianos parece que es un reproche a no poder encontrar ni amparo ni acomodo en ninguna parte, ni siquiera en la casa de los antepasados.
La Naturaleza es el tema omnipresente de “Trastorno”. La Naturaleza será invocada por el Príncipe Saurau, pero también por el médico que recorre el valle con su hijo:
“Precisamente en los días despejados, dijo, en que el mundo se mostraba en todas direcciones transparente como el aire y, simplemente por su serenidad, la Naturaleza era bella, el dolor de los que sobrevivían a alguien muerto hacía tiempo era doble” –solía decir el médico, según el narrador.
Saurau insiste con la Naturaleza: “La persona educada cree siempre que tiene que ser paternalista con la Naturaleza, aunque es totalmente dominada por ella”.
Y al término de “Trastorno”, Saurau trata de comprender a su hijo que vive en Londres y se dedica a estudiar las corrientes socialistas que Saurau desprecia olímpicamente: “Lo que mi hijo cree que es la Naturaleza no es la Naturaleza (…) Mi hijo se enfrenta siempre con la Naturaleza como con una literatura”.
Murau también reflexiona sobre la Naturaleza:
“Sólo cuando tenemos una noción exacta del arte tenemos también una noción exacta de la Naturaleza”.
Pero, ¿qué es la “Naturaleza” en Thomas Bernhard? Podría ser un tema para una tesis doctoral, pero este artículo no tiene más pretensiones que aproximarnos a uno de los escritores en lengua alemana más importantes de la segunda mitad del siglo XX y permitirnos desentrañar su filosofía latente.
Un estudio superficial del suelo filosófico de estas novelas de Bernhard mostraría que hay una patente presencia de ideas ácratas, siendo mencionados Bakunin y Kropotkin, pero -todo hay que decirlo- el pensamiento social es algo que Bernhard no toma en serio; ver en Bernhard a un anarquista es ver demasiado poco. De su obra se deduce que no hay esperanza y la esperanza clausura toda utopía: la misantropía del autor es contraria a soluciones sociales para el problema antropológico que no tiene solución: el hombre es un ser desamparado, víctima de la locura, la enfermedad, la degeneración y la decrepitud que inexorablemente conducen al aniquilamiento.
 
Un estudio edafológico más a fondo exhumaría muestras suficientes para que pudiéramos decir que lo que constituye el macizo sobre el que se asienta el pensamiento de Bernhard es la "Aufklärung" alemana (la Ilustración alemana), el idealismo y Schopenhauer. Pero la filosofía teutónica dieciochesca y decimonónica es imposible de comprender sin hacerse cargo de la repercusión (algo más que una influencia superflua) de la filosofía de Baruch Spinoza en Alemania; así lo veía Friedrich Heinrich Jacobi en aquella famosa polémica intelectual que se agitó en Alemania a finales del siglo XVIII.
Con esta clave hermenéutica se nos franquea la posibilidad de comprender lo que representa la “Naturaleza” en estas novelas de Bernhard: la Naturaleza es Dios, Dios es la Naturaleza. Estamos ante un completo panteísmo que renuncia a exaltar la inmanencia y se resigna a conformarse bajo la abrumadora pesantez de la Naturaleza. Bernhard ha hecho suyo el “Deus sive Natura” de Spinoza y podemos decir que la literatura de Bernhard es, por lo tanto, una tardía manifestación epigonal del panteísmo spinozista. Las novelas de Bernhard tienen un cañamazo más panteísta que existencialista, aunque el pathos de sus personajes atormentados y desarraigados así como la atmósfera en que a duras penas respiran, pudiera hacernos creer que estemos ante novelas existencialistas.
 
El mérito que no podemos regatear a Thomas Bernhard es que en sus novelas asistimos a la lógica conclusión del hombre moderno y occidental, el mismo que ha rechazado al Dios cristiano para arrojarse en el magma incandescente y aniquilador del panteísmo. "Trastorno" y "Extinción" son el testimonio de la desintegración del hombre sin raíces, del sindiós de las sociedades contemporáneas que, aunque no sea tan culto como Bernhard ni como sus personajes, es producto del racionalismo, el panteísmo, la Ilustración y el idealismo.