Manifestación del 12 de octubre (día de la Hispanidad) del 2014 en Barcelona.
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Por Antonio Moreno Ruiz
Historiador y escritor
A propósito de los ultimos acontecimientos ocurridos con el llamado ‘referéndum’ separatista en Cataluña, son propios y extraños los que se preguntan (y en verdad no entienden) qué pasa en España. Ante esto las respuestas nunca son fáciles, pero creemos que hay que darlas, porque en esta suerte de prolongada agonía que parece que sufre España se impone el hablar claro. Y es que hasta el primer ministro británico Cameron intentaba poner cordura pidiendo la unidad de España, lo que nos da una idea de cómo está la situación.
Sea como fuere, vayamos por partes:
- Varios medios europeos y sudamericanos están propagando una falsa noticia en la que un supuesto 80% de los catalanes ha votado por la independencia. Esto es falso, básicamente porque ni tan siquiera un 30% de los catalanes han ido a votar, en una farsa ilegal, en la que encima se ha prohibido votar a los catalanes residentes en otras regiones de España, y donde han votado inmigrantes y menores de edad. Las urnas han estado abiertas varios días, según sus propios organizadores, y según hemos podido ver en muchas imágenes, hay gente que ha votado varias veces. Y aun así, ni al 30% ha llegado. ¿Cómo va a querer el 80% del pueblo catalán separarse de España?
-En verdad se entienden las palabras de Cameron después de lo que ha pasado en Escocia. Pero lo que Cameron y tantos otros no saben es que Escocia en modo alguno se compara con Cataluña. Por ejemplo, ¿Se imaginan que en Escocia se hubiera hecho un referéndum para la independencia de las islas Hébridas? Pues ese sería el paralelismo más serio que podría hacerse. Cataluña, al contrario de Escocia, jamás fue un reino independiente. Si se quisiera hacer un paralelismo de verdad, un remoto referéndum de independencia se tendría que hacer en la Corona de Aragón, esto es, las actuales regiones de Cataluña, Aragón, Valencia e Islas Baleares. Los separatistas catalanes hablan de la ficción de los “Països Catalans”, que nunca ha existido ni histórica ni cultural, e incluso ni siquiera lingüísticamente, pero sin embargo, jamás osarán plantear un referéndum por esas regiones que consideran de su propiedad, porque saben que lo perderían por goleada. Ni aragoneses, ni valencianos, ni baleares, así como la mayoría de los catalanes, quiere separarse de España, nuestra común y milenaria patria. Sin embargo, los separatistas catalanes, amén de emplear juego sucio en su terruño, quieren obligar y sin pedir opinión a otras regiones a lo mismo.
Volviendo a Escocia, ¿se imaginan ustedes que los separatistas dijeran que parte de Escocia ha de apropiarse también de Gales e Irlanda sin preguntar siquiera? Pues ese es el paralelismo más claro que pueden encontrar sobre esta cuestión.
Otrosí, ya que gustan tanto los paralelismos, ¿tendrá que romperse Suiza en mil pedazos por el hecho de albergar cuatro idiomas? No sólo en España se hablan varios idiomas, en verdad eso es así en casi toda Europa. En Francia también están el bretón, el provenzal y el corso, amén de focos de vasco y catalán. En Alemania hasta se habla el sorabo, una lengua eslava muy minoritaria, y en algunas zonas, el polaco, hablado por descendientes de inmigrantes de este país. En Italia está el sardo, el xeneize genovés, el napolitano… Y no digamos ciertos países de Europa del Este. ¿Y en Estados Unidos, que en algunas zonas ya se habla más español que inglés? ¿Y en el Perú, que amén de español, quechua y aymara, en la selva se hablan numerosas lenguas y dialectos? Y lo mismo del Perú se puede decir de todos los países ribereños del Amazonas. En el norte de África, además de un dialecto árabe que ya poco tiene que ver con el árabe clásico hablado más al oriente de Egipto, se habla el tamazight, la lengua bereber. ¿Y qué diremos del África Negra? ¿Saben estas almas de cántaro cuántas lenguas se hablan en China? ¡Hasta en Andorra se habla catalán y castellano!
O sea, que según el criterio separatista “catalán”, ningún país del mundo podría estar tranquilo…
-¿Razones históricas? Veamos cómo son los separatistas: En Andalucía, los llamados “andalucistas” dicen que todas nuestras desgracias se deben a una atroz conquista por parte de unos bárbaros del norte de la Península (entre los cuales se encuentran vascos y catalanes) que arrasaron un mundo islámico idílico. Sin embargo, los separatistas "catalanes" dicen exhortar a Jaime I el Conquistador, rey de Aragón que en el siglo XIII conquistó Valencia y las Baleares al islam, y cuya ayuda fue fundamental para tomar Murcia. Empero, los separatistas se dicen camaradas. Mas si fueran coherentes, estarían enfrentados, puesto que la doctrina “andalucista” critica a los “bárbaros del Norte”, entre los que están los catalanes… Pero por lo visto, el odio, la mentira y la sinrazón es más fuerte que el conocimiento. Sea como fuere, Jaime I el Conquistador, cuando quiso organizar una cruzada que finalmente no prosperó, dejó dicho: “Barones, ya podemos marcharnos, pues hoy, al menos hemos dejado en buen lugar el honor de toda España” (1). Y decimos esto porque según las fantásticas teorías de los separatistas, Cataluña fue un país independiente hasta 1714, en la que la dinastía borbónica se la anexionó por la fuerza, siendo que Rafael Casanova pasa a ser una especie de héroe nacional catalán tipo “Braveheart”. Sin embargo, por supuesto que por aquella época Cataluña formaba parte de la Corona de Aragón y no era independiente de España, y Rafael de Casanova, que luchaba porque el archiduque de Austria fuera el rey de España, dejó proclamado: : "(…) salvar la libertad del Principado y de toda España; evitar la esclavitud que espera a los catalanes y al resto de los españoles bajo el dominio francés; derramar la sangre gloriosamente por el rey, por su honor, por la Patria y por la libertad de toda España"; como bien recuerda una descendiente de Casanova (2), quien no gusta de que utilicen el nombre de su ancestro para falsear la historia, una historia que jamás ha existido más que en cabezas mentirosas. Porque lo que se vivió en España a principios del siglo XVIII fue una Guerra de Sucesión, en la que el archiduque de Austria no aceptó el testamento de Carlos II y, ayudado por Holanda y el imperio británico, se enfrentó a Felipe V, de la casa de Borbón, y rey legítimo de España por el cual lucharon con uñas y dientes vascongados (3) y navarros, a los cuales premió a conciencia.
Si seguimos en la historia, en la guerra contra Napoleón, los catalanes lucharon como un solo hombre con el resto de España. Tanto así que Agustina de Aragón, gran heroína de este conflicto, era en verdad catalana de pura cepa. Como dice José Javier Esparza (4): “Es muy evidente el caso catalán. Allí los franceses, apoyados en una minoría de elementos separatistas, ofrecieron incluso declarar el catalán lengua oficial para una Cataluña concebida como extensión del imperio napoleónico al sur de los Pirineos. Frente a la oferta francesa, la inmensa mayoría de la población catalana prefirió seguir defendiendo a España y, de hecho, después de la guerra aquellos separatistas tuvieron que abandonar el país como “afrancesados”. Recordemos que Agustina de Aragón era una catalana. Los catalanes se batieron igualmente en el Bruc, en Gerona y en otros muchos puntos, con partidas guerrilleras que se convirtieron en una pesadilla para los franceses. En Cataluña, como en el resto de España, la gente peleó por la religión, la patria, la corona y la libertad, y todo era para ellos una y la misma cosa, y todo respondía al nombre de España. Igualmente claro es el asunto en el País Vasco, donde, por cierto, la represión francesa fue muy cruenta desde el primer instante. También desde el primer instante fue clara la determinación de las juntas vascas de defender a España y a la Corona contra la invasión napoleónica. Y hacerlo, además, precisamente en nombre de su españolidad. Hay un documento irrefutable que es la proclama de la Junta de Vizcaya en el mismo año de 1808, apenas desencadenado el movimiento insurreccional contra los franceses, y que es un auténtico llamamiento a la unidad nacional española. Decía así:“Los vascongados a los demás españoles. Españoles: somos hermanos, un mismo espíritu nos anima a todos. Aragoneses, valencianos, catalanes, andaluces, gallegos, leoneses, castellanos, olvidad por un momento estos mismos nombres de eterna armonía y no os llaméis sino españoles. Recibid como prueba incontrastable del espíritu que nos anima, los holocaustos que ofrecen a la libertad española los Eguías, los Mendizábales, los Echevarrías y otros infinitos vascongados”.
Agustina Saragossa i Doménech, más conocida como Agustina de Aragón. Heroína catalana por la independencia de España frente a la invasión napoleónica.
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En esta misma época, los catalanes residentes en Cumaná se organizarían y lucharían a muerte para derrotar a las tropas bolivarianas, que querían separar a Venezuela y demás Españas Americanas de la patria común. Y lo harían con los numerosísimos canarios que luego llegaron a ser destacados jefes realistas, como también lo fue el asturiano José Tomás Boves.
Y en la historia más contemporánea, cierto es que durante los primeros años del franquismo se fue injusto con las lenguas regionales, incluso en contra del criterio de mucha gente que no estaba contra el régimen. Pero pronto pasó, siendo que Cataluña fue la región que más prosperó con el franquismo, atrayendo a multitud de manchegos, aragoneses, murcianos, vascos, gallegos, extremeños, y sobre todo andaluces, para trabajar en su industria; industria que no tenían otras regiones de España, mucho más dependientes de recursos primarios. Y por supuesto, a Franco se le hicieron no pocos homenajes en catalán, de lo cual pasamos a poner ilustrados ejemplos:
Placa en honor al general Franco en catalán, en 1964
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Las fotos no mienten: así agasajaba a Franco el Orfeó Català.
El Barça ¿bastión de resistencia al franquismo? Condecoró ...
Y bueno, todo esto incluso nos lo podíamos haber ahorrado, puesto que antes de existir el nombre “Cataluña”, los francos llamaron a aquella tierra la Marca Hispánica, e “hispani” a su habitantes. Allí fue donde empezó a formarse la palabra “hispani-ol”, antecedente de nuestro gentilicio patrio. Y no en vano, del catalán proceden numerosas palabras que utilizamos en el castellano –vehículo comunicativo español y americano por antonomasia-, tales como “peseta”, “papel”, “avería”, “añoranza”, “butifarra”, “capicúa”, “linaje”, “rol”, “reloj”, “turrón”, y tantas y tantas otras (5).
-Así las cosas, muchos, con toda legítima lógica, se podrán preguntar que cómo es que, estando la historia tan clara, han calado tantas mentiras en una región como Cataluña, que hasta hace muy poco era el motor industrial de España. Es una de las muchas cosas que no se entiende… Y es que poca gente puede entender que en 1978, el régimen encabezado por Juan Carlos y Adolfo Suárez, estableciera una ley electoral indigna e injusta como la Ley D´Hondt, que no significa “un hombre, un voto”, sino que se rige por un engañoso recuento de circunscripciones y proporcionalidades. En un sistema de distritos electorales como el británico, esto es, candidato por cada cien mil habitantes con obligación de tener una oficina en el territorio, y donde el voto es uno, entonces el separatismo no habría salido nunca de ser una minoría. Pero resulta que el separatismo se sirve de un sistema de circunscripciones donde partidos que tienen 300.000 votos tienen más diputados que partidos que superan el millón de votantes. Además, por ley, el Estado subvenciona a los partidos políticos, además de sindicatos y empresarios. Esto es: Los separatistas se sirven de un sistema electoral injusto y de los impuestos de todos los españoles para, asimismo, imponer un sistema educativo demencial donde no se puede estudiar en castellano, un idioma que compartimos más de cuatrocientos millones de personas, y que es la lengua materna de la mayoría de las familias catalanas. Además, a eso se añade a que en en el sistema de comunidades autónomas, cada región estudia una geografía y una historia distintas, y todas, con hechos diferenciales inventados… Y encima, recibiendo subvención del Estado. Porque, por si no lo saben, las fantasmagóricas “embajadas catalanas”, así como las “euskal etxeas” (6), esto es, las sucursales del separatismo “vasco”, también reciben subvenciones estatales; del mismo Estado que en Lima, la capital del Perú, financia a las asociaciones homosexualistas y exposiciones donde se presenta a Santa Rosa de Lima como un travesti (7); mientras que miles de jóvenes licenciados españoles se ven obligados a emigrar, sin posibilidades de pronto regreso.
Toda la oligarquía separatista “catalana” está imbuida en tragicómicos casos de corrupción, en cuentas en paraísos fiscales, en favores y tratos con mafias, etcétera. Y sin embargo, lo único que se les ocurre, ante una Cataluña donde el nombre “Mohamed” comienza a ser más común que “Jordi”, donde la delincuencia, la inseguridad y el desempleo son galopantes, a la par que el islamismo crece como la espuma; pues montan un “referéndum” que, más que recordar a la genuina Cataluña, esto es, región modelo en todo el Mediterráneo, recuerda a un espectáculo tercermundista, en cuyas falsas urnas se veían desde niños hasta hiyabs. Una desfiguración total de uno de los máximos puntales de España.
Y es que como ven, los hechos son demasiados tozudos.
Para terminar, sólo me queda decirles a los amigos extranjeros lo que, con toda razón, tanto me preguntan: Díganme qué pensarían si en sus países un movimiento separatista regional recibiera financiación del Estado, el cual tiene un sistema electoral que les beneficia continuamente frente a partidos que tienen hasta tres veces más votos; que tuvieran fantasmagóricas embajadas pagadas con el dinero de todos ustedes, y que contra las leyes estatales, organizaran un referéndum donde les prohibirían el voto a los naturales residentes en otras ciudades y sin embargo, votaran, amén de menores de edad y amén de varias veces los mismos, inmigrantes recién llegados. Y que aun así, ni la tercera parte de la susodicha región hubiera ido a esta farsa y que sin embargo, buena parte de la prensa dijera que el 80% de los habitantes ha votado por la independencia. ¿Cómo se sentirían ustedes?
En fin, así está Cataluña ante el mundo entero. En cambio, aunque el corrupto Estado la abandone, la marea de catalanes de bien crece y se consolida, gracias, entre otros, al movimiento Somatemps, que viene avalado y dinamizado, entre otros, por el profesor Javier Barraycoa (8). La Cataluña real, cargada de pueblo y tradición, está a flor de piel y no aguanta más que se manipule su nombre por parte de corruptos llenos de mentira y odio; y acaso está destinada a liderar una sana, justa y necesaria reacción en una España castigada por todos lados. Ojalá que así sea, porque como dijo Juan Vázquez de Mella, el gran tribuno de la tradición española: “Después de un primero de mayo terrible, vendrá un dos de mayo más glorioso que el de 1808” (9).
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(1)Véase: Jaime I, «el Conquistador - Gran Enciclopedia Aragonesa
(2)Véase: Una descendiente de Rafael Casanova: "Él era un patriota ...
(3) Entre ellos el guipuzcoano Blas de Lezo, quien a posteriori humillaría a Inglaterra y sus colonias en Cartagena de Indias, ante un intento invasor terrible, un desembarco sólo superado por el de Normandía en la Segunda Guerra Mundial. En contra de lo que algunos dicen, Blas de Lezo no luchó sólo por “responsabilidad nacional”, pues eso no existía (la nación-estado no existía, mejor dicho), sino que luchó por su rey y contra la usurpación venida de Austria y con ayuda británico-holandesa.
(4)Véase: España no nació el 2 de mayo - El Manifiesto
(5) Para mayor información, sígase: Palabras de origen catalán en el castellano - Hispanismo.org
(6) Véase:la euskal etxea no es la casa de los vascos - raigambre
(7) Véase: Urgente convocación: ¡protestemos contra infame ...
SOMATEMPS | secretaria@somatemps.com
Sobre Javier Barraycoa:
Javier Barraycoa | - DolcaCatalunya
Javier Barraycoa, autor de 'Cataluña Hispana ... - YouTube
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(9) Sobre Juan Vázquez de Mella: Juan Vázquez de Mella - Portal Avant!